Cielos del Norte

¡ Greetings !

Bueno, voy a intentar hacer un resumen de lo acontecido durante el primero de estos días intensos. La pena es que no puedo poner fotos de los primeros días pues me resulta imposible leer la tarjeta que usé con la cámara ésos días, cuando vuelva a España os subiré algunas.

PRIMER DÍA - LLEGADA A LONDRES

Salimos de el aeropuerto de Barajas aproximadamente a las 2:20-2:30, nuestro vuelo tenía hora a la 1:45, pero al parecer la llegada tardía del vuelo anterior retrasó el nuestro. Con nosotros viajaban un grupo escolar de niños que iban a estudiar inglés en Londres, se hicieron de notar jeje, a cada sacudida que daba el avión, yo me acojonaba más y los niños gritaban alucinados como si el avión fuera una nueva atracción que acababan de descubrir.

Era mi primer vuelo en avión, nunca había viajado antes en avión y nunca había salido de España. El hecho de que dijeran que llovía en Londres y encontraríamos un ambiente nublado no me resultaba alagador, pero bueno, a veces las cosas hay que hacerlas sin pensarlas demasiado, pues entonces es cuando dejas pasar oportunidades que a lo mejor nunca más puedes repetir en la vida.

Me tocó un asiento pegado a la ventanilla, al principio me creí afortunado, pero cuando empezé a visualizar cómo se agitaba el ala, ya no estaba tan seguro de ello. Con ayuda de mi padre tranquilizándome y mi propia cabezonería y orgullo por superar algo así, al final me acostumbré a ver los edificios tan pequeños como hormigas debajo, junto a algunas nubes bajas...

Cuando estábamos ya en la zona de Gran Bretaña, se hizo notar...El paisaje que había debajo del mar y a lo lejos la costa francesa desapareció y se transformó en una nada blanca en la que casi ni llegaba a visualizar la condenada ala del avión...Al cabo de largos minutos, todo ello desapareció y apareció Inglaterra...Casas alineadas con pequeños jardines vallados por los que se acceden a las susodichos hogares, vehículos corriendo por la izquierda en lugar de por la derecha, largos ríos ondeando a lo largo del paisaje, castillos entre edificios modernos, zonas industriales y puentes gigantescos...Aquello no era nada comparado con verlo a pie.

El avión aterrizó tan pronto que apenas pude disfrutar de estos paisajes, con otra sacudida que me hizo volver a temblar, finalmente nos estabilizamos y todos los pasajeros aplaudimos por el trabajo bien hecho de nuestros pilotos. Ya empezaba a visualizar cómo era todo de diferente que en España, todos los anuncios en inglés, todo la gente que nos cruzábamos hablando inglés, la mayoría rubios y de ojos azules...Estaba fuera de España, abandoné mi tierra y por fin conseguí empezar a conocer otra cultura, otra forma de vida...

Llegamos a la frontera, se veía claramente en una gigantesca sala (ya pondré alguna foto) llena de gente como si fueran las rebajas del Corte Inglés, cientos y cientos de personas allí agrupadas para pasar la frontera británica en la que se visualizaba un gran cartel que ponía : UK Border (Frontera del Reino Unido). Aquí vino la primera de mis muchas sorpresas : La mayoría de la gente que había allí eran indios, indios e indios por todos lados...En España creo que puedo contar con los dedos de las manos los indios que he visto, ahora me faltaría cientos de miles de manos para contar todos los que he visto hasta ahora jeje...

También era agradable ver que también éramos unos cuantos bastantes los españoles que estábamos allí, al parecer había otro vuelo también de Madrid a Londres que llegó a una hora cercana a la nuestra y nos juntamos todos en la frontera inglesa.

Tras conseguir recuperar las maletas ya era hora de empezar a ejercitar el inglés, toda la gente que pasaba por el aeropuerto de Heathrow (el aeropuerto en el que nos encontrábamos) hablaba en este idioma en el que he estado y aún estoy estudiando para poder algún día hablar automáticamente con cualquiera que lo necesite. Lo primero era dirigirnos al centro de Londres, el aeropuerto de Heathrow estaba a cuarto de hora de Central London en un tren especial preparado para ello. Mi padre intentaba hablar con algunos ingleses que pasaban cerca pero ninguno le entendía, le negaban con la cabeza y le daban rápidamente la espalda, menos mal que estaba yo ahí para entender lo que decían e intentar hablar yo, a mí normalmente me captaban a la primera, para que luego me venga remoloneando de que controla el inglés jejeje.

Hablé con el recepcionista de la estación de tren y le pregunté sobre las Oyster Cards, me dijo que las podía conseguir en las cabinas de The Tube, el "metro" londinense, así que cojimos los tickets y fuimos en el tren hasta Paddington. Paddington estaba situada en el centro de Londres, más concretamente en la zona noroeste y nuestro hotel estaba situado en la zona suroeste. Descendimos al Tube y allí me acerqué a una de las taquillas, un hombre claramente indio con un bigote blanco que resaltaba en su oscurecida piel me atendió (tras esperar tras una línea roja en la que todo el mundo hacía cola, respetándola muy minuciosamente) y le pregunté si el carnet de estudiante internacional (ISIC) me descontaba el precio de la Oyster Card. Pues no, vaya...Aun así, el descuento que leí en Internet era de un 30% y no se iba a notar demasiado, pero las Oyster Cards que pedí para mi padre y para mí nos servían para viajar ilimitadamente durante una semana tanto en bus como en Tube así que acepté y pagué. Pero tenedlo en cuenta : NO ACEPTAN CARNÉS DE ISIC PARA DESCONTAROS LAS OYSTER CARDS, avisados quedáis.

En fin, llegamos a Fulham Broadway desde Paddington en la línea District. Es curioso pero en Londres le ponen nombres a las diferetes líneas en lugar de números como ocurre en Madrid y en Barcelona. En ésos nombres se intenta "definir" por qué lugares de la ciudad pasan los trenes de Tube, he de decir que estoy bastante contento con lo bien indicado que viene todo allí.

Una vez salimos a la calle en Fulham Broadway, la estación de Tube más cercana a nuestro hotel, mi padre y yo nos dimos cuenta de un error muy grave que cometimos y que espero no volveremos a cometer...¡¡ No teníamos ningún mapa !! Dimos vueltas por las calles pensando un poco por intuición cómo llegar a Imperial Road. Preguntamos a mucha gente y, o bien nos daban cientos de indicaciones y al final no nos aclarábamos o bien dábamos con gente que no era de la zona y no tenía ni idea de cómo moverse por allí (o no quería entretenerse con dos españoles perdidos en Londres jajaja). Sin embargo, ésto nos sirvió de paso para ir viendo cómo eran las calles londinenses. Me recordaba mucho a Galicia, las calles tenían un paisaje entremezclado de verde y edificios antiguos hechos al ladrillo clásico...Todo con un estilo bastante elegante y que me veo incapaz de describir con palabras. El ambiente se notaba húmedo y refrescante para el calor que habíamos pasado en España y nos llovía a cántaros, lo que nos obligó a colocarnos las cazadoras y sacar los paraguas, menos mal que fuimos precavidos y los trajimos a pesar de que estamos en verano...